La Cúpula de la Roca es un edificio de extraordinaria belleza, solidez, elegancia y singularidad de forma … Tanto por fuera como por dentro, la decoración es tan magnífica y la mano de obra tan superior como para desafiar la descripción. La mayor parte está cubierta de oro para que los ojos de quien mira sus bellezas queden deslumbrados por su brillo, que ahora brillan como una masa de luz, ahora brillan como un rayo.
Con la conquista de Palestina y Jerusalén en la tercera década del siglo VII, el califa Abd alMalik llamó a los mejores albañiles y artesanos disponibles para construir un edificio, la Cúpula de la Roca, que hoy día es el edificio islámico más antiguo que ha perdurado en su forma original. Terminado en 692, encierra una gran roca en su centro, el punto más alto del monte Moriah, desde el cual, según la tradición musulmana, el profeta Mahoma ascendió a los cielos al final de su Isra’ (o “viaje nocturno”) a Jerusalén.
En la tradición judía, ésta es la piedra fundamental, el fundamento simbólico sobre el que fue creado el mundo y el lugar donde, por mandato divino, Abraham estuvo a punto de sacrificar a Isaac. Según la tradición cristiana, en esta misma ubicación sucedieron números hechos importantes en la vida de Jesucristo, de modo que se trata de un lugar sagrado para las religiones judía, cristiana e islámica.
El edificio, bizantino en concepto y con ornamentos sasánidas, tiene acceso por los cuatro puntos cardinales. La cúpula tiene 20 metros de diámetro y está apoyada en un tambor que descansa sobre un doble sistema de pilares y columnas. De planta centrada octogonal, su interior encierra un deambulatorio doble: el externo es octogonal y consta de 24 arcos apoyados en 8 pilares y 16 columnas; y el interno, de planta circular, con otros 16 arcos que recaen sobre 4 pilares y 12 columnas. Ambos anillos están girados uno respecto al otro, de modo que los cuatro pilares del interno dan frente a los arcos del externo, creando un juego dinámico de geometrías cuadradas y circulares.
Materiales de la cúpula de la Roca
La cúpula y el tambor cilíndrico no son de ladrillo o piedra, sino de madera. La cúpula está cubierta con chapa de aleación de cobre y el tambor con brillantes mosaicos de motivos de colores azul, rojo, verde y gris. El interior, a la manera bizantina, fue decorado con mosaico y un chapado de mármol en la parte inferior. Aunque sea considerada como una mezquita, el edificio es mucho más que eso.
No sólo es un recinto geométrico y paradisíaco, y una exaltación de un lugar de particular veneración, sino también una emulación de la Kaaba de La Meca. Sin embargo, a diferencia del edificio de La Meca, que puede ser circundado, pero al que no se puede entrar, en este sí se puede entrar, aunque, debido a la presencia de la roca, el centro del edificio sigue siendo, en esencia, inaccesible. Además, puesto que lo que se ve no es una roca sino el pico de un monte, se tiene la sensación de que la arquitectura está suspendida alrededor de ese pico.
La historia del sitio ha sido objeto de numerosos debates. El lugar fue consagrado primero por los israelitas, quienes construyeron el Primer Templo y el Segundo Templo. Después de que el Segundo Templo fuera demolido a manos de los romanos en 70, el emperador Adriano construyó un templo a Júpiter, que tal vez estuviera vinculado a una estructura octogonal, por lo que hay un sector de estudiosos que sostiene que sirvió como cimentación a la Cúpula de la Roca, aunque este aspecto no ha sido probado arqueológicamente, al menos de momento. Los cruzados consagraron el edificio como iglesia católica, pero, tras su derrota, volvió otra vez al islam.