En este articulo hablaremos sobre el premio pritzker de arquitectura, un prestigioso premio otorgado anualmente a un arquitecto vivo cuya obra ha producido innumerables contribuciones a la humanidad a través del arte de la arquitectura.
La Arquitectura es, sin duda, una de las actividades humanas más interesantes que existen. Su peculiar mezcla de estética y utilitarismo no deja de fascinar a muchísima gente, y no deja de originar debates, la mayoría constructivos, con diferentes profesionales relacionados con ella.
Y también, por el impacto social de esta actividad, se genera alrededor de ella una legítima necesidad de reconocimiento. Es decir, la comunidad arquitectónica ha considerado que es necesario el dar reconocimiento público a los arquitectos que demuestren un desempeño excepcional. Es por eso que se han concebido diferentes galardones para reconocer este trabajo.
Varios son los premios internacionales que reconocen el trabajo de los arquitectos; existe el premio Mies Van der Rohe (nombrado en honor del célebre arquitecto estadounidense de origen alemán, Ludwig Mies Van der Rohe). También se entrega la Medalla de Oro del Instituto Real de Arquitectos Británicos (RIBA, por sus siglas en inglés).
Pero fuera de toda duda, el reconocimiento más prestigioso en el mundo arquitectónico es el Premio Pritzker, al punto de conocerse, no sin cierta polémica, “El Nobel de Arquitectura”. Es, además, el premio del ramo que recibe más cobertura de los medios.
El propósito del Premio Pritzker de Arquitectura es honrar a un arquitecto o arquitectos vivos cuyo trabajo construido demuestre una combinación de talento, visión y compromiso; y ha producido contribuciones consistentes y significativas a la humanidad y al entorno construido a través del arte de la arquitectura.
El Premio Pritzker.
La Fundación Hyatt otorga el Premio Pritzker una vez al año, a un arquitecto que haya demostrado a través de su talento y creatividad, una significativa contribución una mayor riqueza del acervo humano.
El galardón consiste, desde 1987, en una medalla de bronce con el nombre del premio en el anverso,y las palabras “firmeza”, “comodidad” y “deleite”, formando un patrón triangular. Además de la medalla, se entrega un premio de cien mil dólares en metálico. Antes de 1987, en lugar de la medalla, se entregaba al ganador una escultura de edición limitada, elaborada por el afamado escultor británico Henry Moore. Esta práctica fue abandonada debido al fallecimiento del escultor en 1986.
El premio se entrega en vida; esto quiere decir que el arquitecto premiado debe estar vivo para el momento en que el jurado le comunica la decisión. Cada año el premio se otorga en una ceremonia celebrada en algún lugar distinto del mundo. El lugar se elige por su relevancia arquitectónica, y no tiene nada qué ver con la nacionalidad o trabajo del premiado. Esto se logra eligiendo el lugar antes de seleccionar al ganador.
La ceremonia es más bien breve, consistente en una introducción a cargo de algún representante del país sede, seguido de unas palabras del representante principal del jurado. A continuación Tom Pritzker hace una presentación del premio, que el galardonado acepta a través de un discurso al efecto.
Historia del Premio Pritzker de Arquitectura.
La Fundación Hyatt fue fundada por el empresario estadounidense Jay Pritzker, propietario de la cadena hotelera Hyatt. En 1978, Pritzker y su esposa Cindy decidieron, a través de la fundación Hyatt, instituir un premio que reconociera la importancia del trabajo de algún arquitecto, y su aporte al enriquecimiento del entorno humano.
El fundador de Hyatt falleció en 1999, por lo que en la actualidad el Premio Pritzker es entregado por el hijo mayor de la pareja fundadora, Tom Pritzker, actual presidente de la Fundación.
Los Pritzker, inspirados por la influencia arquitectónica del primer hotel Hyatt en Los Angeles, consideraron que un premio a esta actividad podía servir como incentivo para una mejor y más creativa práctica de la arquitectura, así como estimular una más clara comprensión entre el público de las nociones arquitectónicas de las grandes edificaciones.
La organización del Premio Pritzker, el protocolo para la selección del ganador y la ceremonia de entrega, siguen un patrón similar a los de la entrega del Nobel, y quizá sea esta una de las razones por las que los medios consideran a estos dos galardones al mismo nivel de importancia.
Mecanismo para la entrega del Premio Pritzker.
La Fundación Hyatt tiene designado un jurado para la selección del ganador, consistente en un mínimo de cinco y un máximo de nueve miembros. Este jurado delibera sobre los méritos particulares de cada nominado, antes de emitir un veredicto.
La decisión del jurado se comunica al ganador a principios de año, normalmente en enero. Como la ceremonia de entrega tiene lugar casi siempre fuera del país de residencia del ganador, esto permite que el seleccionado disponga las gestiones que requiera para asistir a la entrega. La ceremonia se lleva a cabo a mediados de año, finales del mes de mayo o principios del mes de junio.
Lo miembros del jurado cambian cada cierto tiempo, lo cual es un recurso usado por la Fundación para añadir un elemento más de transparencia a la selección. La rotación de los miembros del jurado también permite que los mismos adapten la entrega del Premio Pritzker al conocimiento de nuevas tendencias en una disciplina tan cambiante como lo es la Arquitectura.
Las diferentes sedes que ha tenido el Premio Pritzker.
Los sitios que se han seleccionado para la entrega del Pritzker han sido tan interesantes como el trabajo de los arquitectos que lo han recibido. Se eligen cada año, antes de proceder a la selección del ganador, de modo que no tengan relación. Esto no excluye que pueda haber coincidencias, por lo menos en la nacionalidad del galardonado, que puede ser en alguna ocasión el mismo país donde se ha elegido la entrega.
La primera sede en 1979 correspondió a Dumbarton Oaks, una mansión decimonónica ubicada en Washington D.C., actualmente la sede de una importante Biblioteca de Investigación. Repitió como sede para la entrega del Premio Pritzker al año siguiente.
Otros sitios interesantes que ha repetido como sedes han sido el Palacio de Versalles, en el pasado residencia real francesa, y hoy sede del Museo de la Historia de Francia. El sitio que más ha repetido como sede es el Instituto de Arte de Chicago.
Entre los sitios más interesantes que se pueden nombrar como sedes para la entrega del premio, se hallan: la sede de las Naciones Unidas en Nueva York, en 2016; en el año 2010 se eligió la isla Ellis, también en Nueva York, antigua aduana principal de los Estados Unidos. Y también se ha usado como sede, en 1998, la Casa Blanca, actual residencia del Presidente y sede del gobierno de los Estados Unidos.
En solo una ocasión se ha elegido una sede relacionada directamente con la Fundación, cuando en 2005 tuvo lugar la entrega del premio en el Pabellón Jay Pritzker en Chicago. Es un pabellón para eventos musicales localizado en el Millenium Park, y es un diseño de Frank Ghery, arquitecto canadiense que ya había ganado el Pritzker en 1989.
Algunos ganadores destacados del Premio Pritzker.
Uno de los galardonados más reconocidos es precisamente Frank Ghery, que tiene como una de sus obras más conocidas la Sala de Conciertos Walt Disney en Los Angeles. También se puedes destacar a Jørn Utzon, arquitecto danés que diseño la célebre Casa de la Ópera de Sydney en Australia.
Quizá uno de los más famosos arquitectos en recibir el premio haya sido el longevo I. M. Pei (1917-2018). Fue un arquitecto de origen chino, radicado en los Estados Unidos desde 1955. Uno de los diseños más reconocidos que tiene en su haber es la Pirámide de Cristal que se halla en el Muso de Louvre , en París.
Los países que más han obtenido el Premio Pritzker han sido, de lejos, Japón y los Estados Unidos. Esto probablemente se deba a una mayor producción arquitectónica en estos países. Europa en su conjunto supera a ambos países, aunque individualmente cada nación europea haya obtenido uno o dos premios.
Pasó bastante tiempo desde la institución del premio hasta la primera vez que fuera otorgado a una mujer: la arquitecta inglesa de origen iraní Zaha Hadid. Desde entonces, y hasta 2019, solo se ha otorgado en dos ocasiones más a mujeres, siempre de forma conjunta: a Kazuyo Sejima en 2010, en conjunto con Ryue Nishizawa; y a Carme Pigem en 2017 como parte de la firma RCR Arquitectes.
Un caso notable fue el del llamado “Pritzker póstumo” otorgado en 2015 al arquitecto alemán Frei Otto. Una de las normas para la entrega del premio es que debe ser otorgado al arquitecto en vida. En 2015, siguiendo el procedimiento usual, se eligió al veterano Otto, notificándole del premio en enero. Sin embargo el arquitecto, ya casi de 90 años, falleció en marzo, antes de la entrega. En virtud de su dilatada trayectoria y de lo desafortunado del fallecimiento, se hizo una excepción por ese año y se entregó post mortem.
Cuestionamientos al Premio Pritzker.
A pesar de la importancia del premio, o precisamente por ella, su entrega no se ha mantenido libre de cuestionamientos.
Uno de los más conocidos tiene que ver con la situación de las mujeres en cuanto a la entrega del premio. No tanto por la poca cantidad de veces que lo han recibido; también se ha criticado que en ocasiones han sido excluidas cuando han ganado como parte de un equipo. Esto se notó en 1986 cuando la alemana Elisabeth Haggenmüller no fue reconocida a la par de su compañero de equipo y esposo Gottfried Böhm. También ocurrió cuando el estadounidense Robert Venturi ganó en 1991, a pesar de trabajar siempre en conjunto con su esposa Denise Scott .
Otro frente por el que se ha cuestionado el premio ha sido la presencia de profesionales alejados del mundo de la arquitectura entre los jurados, como es el caso de la presencia del magnate automovilístico indio Ratan Tata; aunque en este caso, hay que reconocer que Tata tiene un título de arquitecto de Cornell. Quizá más razón se tenga al cuestionar que el presidente del jurado sea el juez estadounidense Stephen Breyer, aunque haya estado involucrado con el quehacer arquitectónico durante su gestión.
Pero el cuestionamiento más sólido reside en un aspecto normativo del Premio Pritzker: es un galardón que se otorga a arquitectos que deben estar vivos. Pero al mismo tiempo el premio se otorga por trayectoria, no por una obra en concreto. Sucede a veces, entonces, que se otorga el premio a arquitectos cuya trayectoria decae en los años que siguen a la entrega del premio. Se ha señalado como ejemplo de esto a Zaha Hadid.
Otros críticos han cuestionado que se pueda estar otorgando el premio en función de la tendencia arquitectónica dominante para el momento de la entrega, como lo fue a finales del siglo XX, cuando el posmodernismo era la tendencia cultural dominante.
El Nobel de la Arquitectura.
Esta expresión en particular resulta bastante controversial. A pesar de que el Premio Pritzker fue concebido tomando como modelo el Nobel, las diferencias entre ambos premios resultan bastante evidentes.
Para comenzar, la Academia Sueca otorga el Nobel por algún descubrimiento o contribución especial en el campo de las ciencias. De este modo, un ganador del Nobel puede volver a ganarlo años después. El Pritzker, al premiar una trayectoria, hace que repetir el galardón ya no sea posible, aunque el arquitecto se haya superado a si mismo después de premiado.
Por otra parte, el jurado del Nobel es más numeroso, lo cual probablemente aumenta el rigor de la selección. Aunque la afirmación anterior sea objeto de debate, la organización del Nobel sí es bastante más exigente.
Por último, es claro que existen otros premios para la Arquitectura, y que estos premios han reconocido a profesionales cuya valía no tiene nada qué envidiar a la de un ganador del Pritzker. Por lo tanto, considerar a este premio como una versión del Nobel para el trabajo arquitectónico, no es del todo exacto.
El valor del Premio Pritzker.
Pero por ninguna razón los cuestionamientos anteriores deben tomarse como motivo para restar méritos al premio de la Fundación Hyatt. Antes bien, es justo que se utilicen mas bien para darle al galardón una perspectiva más precisa y que su valor no decaiga.
El Premio Pritzker se ha ganado por mérito propio su lugar como el más importante de los premios de Arquitectura, y su comparación con el Nobel no responde a su semejanza en procedimientos, sino a su relevancia para la disciplina que reconoce.
¿Quiénes han ganado el Premio Pritzker?